Foto: Begoña Lumbreras |
Nº 282 - p 15 - JAIME CUENCA
... las acuarelas de Antón Hurtado (Pamplona, 1946) reviven sus pasos por el camino de Santiago (del que es todo un asiduo). Pintados al aire libre o recreados luego en el estudio, estos paisajes trasladan al espectador a otros aires, más limpios, y otros horizontes, más abiertos. Como buen acuarelista, Hurtado tiene ojo para la instantánea, pincelada rápida y un color transmisor de atmósferas. Es capaz de sugerir contextos con los mínimos elementos, insinuando apenas. Pero forman parte de la muestra también dos acuarelas de gran tamaño que sobrecogen por su contundencia. El cuidado en la composición y el estudio de los matices sirve aquí a una carga emocional sin aspavientos, signo distintivo de los buenos paisajistas.
InfoENPUNTO - Texto en "berria" - Imágenes de la exposición
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